¡Cómo adoro la sensación de desconectar y ver mundo!
En un plan algo improvisado, preparé las maletas y puse rumbo a Venecia; una ciudad cargada de belleza, romanticismo y parajes increíbles. Antes ya había visitado Italia, pero debo confesar que la llamada “ciudad de los canales”, tiene un encanto especial, esa capacidad de volver hacia el pasado, un pasado repleto de arte, música y costumbres, que los venecianos han sabido conservar a lo largo de los años. Por unos días cambié el metro por el “vaporetto”, y la sensación de tranquilidad invadía mi cuerpo, al mismo tiempo que observaba desde el mar las maravillas que me mostraba esta preciosa ciudad. Me instalé en la zona de Lido, en la via Malamocco, un sitio tranquilo, para desconectar del cargado ambiente turístico del centro de la ciudad.
Los dos primeros días aproveché por visitar las zonas de Arsenale, Santa Elena y posteriormente visitar la Piaza de San Marco. Me asombró el encanto que tenían los callejones de la ciudad. Siempre he creído que las ciudades son los libros que se leen con los pies, y me encantó perderme por las calles, con la incertidumbre de saber lo que me encontraría al final de cada uno de esos callejones rodeados por canales. Después de andar y andar, nada como disfrutar de la rica comida italiana para reponer fuerzas. Uno de esos días, por casualidad entré en un portal y pude adentrarme en una exposición increíble, repleta de unos cuadros preciosos e innovadores; siempre es un placer rodearse de buenas obras de arte; aunque debo confesar que lo que más me llamó la atención fue la organización y el diseño minimalista que tenía, mientras cruzabas de una sala a otra, que maravilla! A veces en los sitios dónde menos te esperas, te encuentras grandes tesoros que te sacan una sonrisa.
La zona de San Marco me enamoró, sobretodo la basílica, una preciosidad que te deja sin habla. En la Piazza de San Marco pude disfrutar de un delicioso helado de Stracciatela, mientras me paseaba observando las diversas tiendas de máscaras. Me acuerdo que entré en una en la que alquilaban trajes, y había máscaras impresionantes; un año me encantaría poder ver el carnaval veneciano y disfrutar de un mar de colores en esta plaza tan simbólica y especial.

Una de las cosas que más me fascinaron en los últimos días fue la visita a la isla de Murano, me podría pasar horas y horas, observando las piezas que los maestros artesanos hacían con el cristal, una verdadera preciosidad. Como os conté , me encanta recorrerme las ciudades, descubriendo callejones, que te sorprenden de principio a fin.
Y es que con el tiempo, como más avanza, me doy cuenta de lo mucho que me encanta viajar, coger un avión y aterrizar en una nueva tierra, repleta de nuevas culturas, nuevas ideas y nuevas formas de ver el mundo; porque de alguna forma el hecho de viajar nos ofrece una nueva vida, con un comienzo y también un final, pero con un montón de experiencias almacenadas y vividas; conociendo a gente muy diferente, y puedo afirmar que viajando siempre se aprende algo nuevo; este aprendizaje es para mí una de las cosas más valiosas que nos puede entregar la vida. Murano me cautivó desde que pisé la isla, pero también debo decir que por casualidad aterrizamos a unos jardines preciosos, ese tipo de espacio dónde reunirte con tus amigos, disfrutando del aire libre, y de los parajes que la naturaleza nos ofrece. Y cuando te vienen a la mente todos esos viajes y con ellos las experiencias muestras esa sonrisa, aquella que te sale inconscientemente recordando todos los buenos momentos; porque de hecho lo mejor de recordar es que puedes regresar cuando desees.
Eso sí, debo confesar que soy una gran fan de la comida italiana, y aproveche cada día para ponerme las botas y disfrutar de esta comida tan y tan rica. Realmente, es un viaje que aconsejo a cualquiera, por la magia, belleza y encanto que tiene; Venecia marca un antes y un después, y espero volver pronto por tierras italianas.
» La gustaba que en Venecia no hubiese automóviles. Eso daba a la ciudad un aire más humano. Las calles eran sus venas y la gente que iba y venía constantemente era la sangre».
Hola Ona!
Este próximo agosto pasaré un par de días en Venecia, así que tomo nota de tus apuntes
Besos
http://www.mybeautrip.com
Espero que te sirva este post, ya me contarás que tal el viaje!
Besos guapa
BEAUTIFUL!
xo,
Bri
City Fashion Girl Blog
Yes, it’s so beautiful!
Me encanta Venecia, algún día iré y seré una auténtica friki turista con cámara en mano jejeje. Un besito guapa.
A mi me encantó, es una auténtica preciosidad.
Besos guapa
I’ve always wanted to go to Venice
Your pictures make me really want to go now!
http://www.fineclic.blogspot.com
Love your blog!
http://www.bonaupetite.com
Woow!! Me has dejado impresionada, ya que nunca he estado en Venecia pero la has descrito de tal forma que es como si estuviera recorriendo sus canales maravillosos y sus plazas preciosas… ¡Algún día quiero ir de verdad!
Un besito, guapa.
Que bonita Venecia!! Fui a una boda alli hace tiempo ya que una amiga se caso con un italiano de Venecia y es la boda mas romantica y bella que he asistido jamas!
Ademas de que nos quedamos una semanita de vacaciones por alli…Que Buenos recuerdos me trae tu post
http://www.travelera.es
Increïble ????